“Una Afición Que Se Convirtió En Obsesión”: La Nueva Vida De Un Ex Campeón Mundial
El hacerse de un lugar en el mundo del fútbol puede ser para la gran mayoría de los hombres del planeta, un sueño hecho realidad. Pero hay un futbolista de renombre, con una carrera envidiosa y con participación en su seleccionado que no encontró la felicidad hasta que dejó el fútbol.
Repasa los hechos que propiciaron que Fabien Barthez comenzara la vida que quería para él cuando abandonó el fútbol y comenzó a practicar este otro deporte.
De los mejores arqueros del planeta
La historia de Barthez dentro del mundo del fútbol no es la de un jugador más. El portero francés ha sido uno de los mejores del mundo a fines de la década del 90´. No por nada jugó en el Manchester United y en el Olympique de Marsella además del Mónaco, Toulouse y Nantes.
Dos grandes títulos
Sus mejores actuaciones en el fútbol coincidieron con los dos grandes lauros que logró a lo largo de su vida profesional. En primer lugar llegó la Copa del Mundo en Francia 1998 y luego la Eurocopa del 2000 en Holanda. Ya en 2003 alzó la Copa Confederaciones en su tierra natal.
Sus actividades no eran compatibles
El automovilismo siempre ocupó un rol importante en la carrera del portero pero siempre en segundo plano por sus continuas preparaciones físicas y mentales que demanda el fútbol. Los viajes, las horas de entrenamiento, los constantes partidos de fin de semana y de entre semana hacían imposible que desarrollara ambas actividades.
"Una afición que se convirtió en obsesión"
Aquel fanatismo que tenía por los motores y por el automovilismo tuvo su momento de gloria cuando a los 36 años se retiró del fútbol. "Pasé tres meses aprendiendo todo lo que pude. Fue una afición que se convirtió en obsesión" explicó Barthez. Su vida le provocaba de inmediato dedicarse de lleno a otro deporte.
Primeras experiencias
Sólo un año después de su retiro del fútbol, que fue en 2007 con la casaca del Nantes, el calvo portero se dispuso a competir en la Porsche Carrera Cup de Francia. Y en 2009 ya consiguió su primera subida a un podio, en el Campeonato FFSA GT. En 2011 se convirtió en el mejor en el Circuito de Navarra de la Serie FFSA al ganar su primer carrera de automovilismo.
Próxima meta
Barthez, que se vistió de azul francés para representar a su país en las copas del mundo de Francia 1998, Corea Japón 2002 y Alemania 2006, reveló: "Siempre me han fascinado los deportes de motor, incluso cuando jugaba al fútbol. Siempre me intrigó". Esas ganas de competir e interiorizarse lo llevó a plantearse la meta de correr su cuarta carrera de 24 horas en Le Mans.
Debut en la gran carrera
Aún aquellos que no conocen sobre el mundo del automovilismo han escuchado hablar de las 24 horas en Le Mans. La primera participación del ex Manchester United allí se dio en el 2014. Acabó en el vigésimo noveno -29- puesto en la general y noveno -9- en la calase LMGTE. El coche que condujo fue un Ferrari 458 del equipo Sorfrev ASP.
Se tomó un descanso y retornó
No fue hasta el 2016 que Barthez volvió a competir en dicha famosa carrera ya que en el 2015 desistió de participar. Para su retorno preparó un equipo propio llamado Panis-Barthez Compétition. Junto a él colaboró el ex piloto de Fórmula 1 Olivier Panis quien había corrido durante 11 temporadas en la máxima categoría. Finalizaron en el puesto 12 aquel año.
Una vida esperando su sueño
Las concentraciones que debió atravesar, los partidos en los que debió atajar con el automovilismo en su cabeza. "Tuve que esperar hasta el final de mi carrera profesional para intentarlo." sentenció el ex futbolista que se siente acobijado y con una nueva vida en el horizonte tras cambiar de deporte.
La gran diferencia con el fútbol
El deporte de la pelota tiene una fecha de expiación bastante prematura, hecho que Barthez recalca al marcar la diferencia entre el automovilismo y su otro deporte: "Esto no es como el fútbol. Todavía puedes ser bueno incluso cuando tienes 35 años, la edad que tenía cuando dejé de jugar". Sí que está desarrollando una vida por amor al deporte.
Mejor novato del año
Durante los dos años de prueba a los que se sometió el ex portero para seguir creciendo en su nuevo deporte, adquirió cualidades para hacerse del título al Mejor Rookie-novato- del año. No se comparará con haber salido el Mejor Portero del Mundo según la IFFHS en el 2000 pero fue un gran reconococimiento para sólo 4 años en el automovilismo.
Su mejor año
El 2013 le trajo a Barthez su mejor año en lo que va de su corta carrera como piloto. Pudo superar la actuación del 2012 en el Circuito de Navarra, al ganar en dos ocasiones y subirse en otras seis al podio para alzarse con el título. Asimismo, ganó dos carreras en la clase amateur del Campeonato FIA GT.
Consciente de lo que ha logrado
Siempre se lo vio al ex portero como un personaje pensante y no impulsivo y ello no cambió al modificarse su deporte. Él trazó un análisis de su corta experiencia: "Al empezar al temporada no soñábamos con este resultado hasta que llegamos a la última prueba. Soy consciente de que todavía tengo mucho que aprender y progresar".
"Tiene cualidades"
Su compañero de equipo, Olivier Panis le aseguró a varios medios que el ex portero tiene grandes cualidades para convertirse en un buen piloto. Por ello apostó a formar el equipo que se entrometió a la mayor categoría que un piloto puede aspirar a competir.
Fue el más joven
A los 22 años, Fabien Barthez acabó con uno de los sueños que todo futbolista europeo anhela durante toda su vida y muchos no logran conquistar, el obtener la Champions League. Fue con el Olympique de Marsella que en 1993 se hizo del máximo torneo del Viejo Continente contra el Milan y en Múnich. Casillas luego, en el 2000, le arrebató el récord.
Reemplazó a una leyenda
El carácter que debió formar el calvo portero de seguro que le ayudará en la actualidad al momento de prepararse para una carrera. Cuando arribó al Manchester United en el 2000 debió reemplazar ni más ni menos que a Peter Schmeichel, el portero danés que es considerado como uno de los mejores de la historia.
El famoso beso
Quien poco sepa de Barthez seguro haya escuchado hablar del famoso beso con Lauren Blanc. Ello se trata de que el portero y el defensor central tenían un ritual antes de cada cotejo importante y era que Blanc le besara la cabeza calva a Barthez. Dicha actividad se replicó en la selección de Francia como en el Manchester United.
Se codeó con la realeza
Es un secreto a voces en Europa que la princesa Estefanía de Mónaco y Barthez mantuvieron una relación en secreto en el año 1998 mientras el portero estaba en la cima de su rendimiento. Ella, era bastante libre en cuanto al amor ya que también se había relacionado con un guardaespaldas suyo.
Se recuerdan sus errores
El puesto de guardameta en el fútbol es uno muy especial. No sólo por ser el único en todo el campo en poder utilizar las manos sino que un error suyo equivale a cuasi un gol del equipo rival. Es una posición en la cual no se puede tener errores porque no hay nadie detrás tuyo que te resuelva el problema. Barthez ha tenido innumerable de situaciones grotescas con errores aún recordados.
¿Adrenalina?
La gran mayoría de los futbolistas cuando acaban su carrera como jugadores intentan buscar en otras actividades los sentimientos que ya no son generados por el fútbol. En muchos casos ello no se puede encontrar pero en otros, como el de Barthez, su satisfacción es tan grande como cuando estaba defendiendo los tres palos en el mítico Old Trafford ¡Bien por él!