Un Piloto De Fórmula 1 Atropelló A Su Mecánico
Aquellos que siguen la Fórmula 1 son amantes de la velocidad, de la repentización, la adrenalina y los giros inesperados en una carrera. Pero también están abiertos a la sorpresa, como la que vivió Kimi Raikkonen en el Gran Premio de Bahrein en donde atropelló a su propio mecánico.
En plena competencia, cuando los pilotos entran a boxes con sus automóviles, es vital que sus compañeros de equipo hagan los cambios de neumáticos o resuelvan cualquier otro inconveniente en cuestión de segundos para que no se retrasen en la carrera. Cada milésima fuera de la pista se puede pagar muy caro, como también un error fuera de ella.
La desgracia ocurrió cuando en la vuelta 37, el piloto finlandés estaba luchando con su Ferrari ante los pilotos de Mercedes. Fue entonces que decidió pasar por los mecánicos de su equipo en la zona de paradas y allí, sin intenciones, pasó por encima de las piernas de uno de sus mecánicos con su Ferrari SF71H provocándole algunas fracturas. Un importante error de cálculo se dio en el equipo ya que el campeón mundial en 2007 había recibido la orden para continuar pero su ayudante no había finalizado de colocar la rueda trasera izquierda.
El mundo del automovilismo ha evolucionado increíblemente de la mano de la tecnología sin embargo algo falló. Es que las pistolas que colocan las tuercas de las distintas ruedas para ajustarlas disponen de sensores que son activados manualmente por los mecánicos y que dan el alerta de que han acabado con su trabajo. No es entonces hasta que los cuatro mecánicos de las diferentes ruedas acaban con su trabajo y dan esa alerta que el encargado del gato no baja el monoplaza al suelo.
Raikkonen fue avisado a metros de volver a retomar la carrera y frenó su vehículo para unirse al resto del equipo para atender la salud de su mecánico y abandonando la carrera que ya estaba en la fase final. El integrante afectado, Francesco Cigarini, fue finalmente intervenido un día después por la doble fractura de tibia y peroné que sufrió. En cuanto a lo deportivo, el equipo fue multado con 50 mil euros porque los comisarios de la carrera entendieron que “el equipo había dejado salir el coche de manera peligrosa para su personal, lo que causó la lesión.“